Por Aida Baida Gil.
Hay muchas veces en las que te propones
hacer algún tipo de cambio, ya sea relativamente pequeño o de mayor
impacto y al final acabas posponiéndolo o abandonando al poco de
empezar. Quizá te hayas propuesto cambiar algunos hábitos para estar más
sana, o un cambio de carrera más o menos drástico y, al final, no te
has atrevido a dar el paso o has renunciado antes de lo que pensabas. En
ese caso, te será útil identificar tres errores que solemos cometer
cuando queremos empezar algo que supone un cambio importante, ya sea
profesional o personal.
1. Buscar validación en los sitios equivocados.
O, mejor dicho, en las personas
equivocadas. Cuando vas a empezar algo nuevo es normal tender a buscar
validación entre los que nos rodean. A veces como ese pequeño empujón
que nos falta, a veces solo para corroborar que tendremos apoyo. Lo
ideal sería ser lo suficientemente independiente y fuerte como para no
necesitar ningún tipo de validación externa. Pero es difícil, así que si
no te queda más remedio y quieres recurrir a ella, mira bien dónde vas a
buscarla, a quién vas a recurrir. Volvemos a lo que comento siempre,
procura rodearte de gente positiva que te apoye. ¿Para qué vas a buscar
validación en alguien que sabes de antemano que te va a poner pegas o va
a criticar lo que quieres hacer? Hay veces en las que es mejor
comentarle tus planes solo a aquellas personas que sabes que te van a
escuchar y no necesariamente a darte la razón, pero sí a ayudarte de
manera constructiva. O bien no comentar tus planes hasta que no estés
convencida de que nadie te va a hacer cambiar de opinión porque estás
segura de lo que quieres.
2. Negar tus barreras y juzgarte a ti misma.
Todas tenemos una serie de barreras que
suponen un obstáculo para nuestros planes, y lo que solemos hacer al
respecto es criticarnos duramente por ello e intentar aguantarnos y
seguir adelante; cuando lo más fácil sería ir por otro camino que no
tenga esa barrera. Un ejemplo perfecto podría ser mi aversión a los
gimnasios. Durante mucho tiempo asumí que para estar en forma tenía que
apuntarme a un gimnasio. Daba igual que no me gustaran, eso eran
excusas, lo que pasaba es que era una vaga. ¿Qué es lo que estaba
haciendo aquí? Primero juzgarme a mi misma. ¿De verdad soy una vaga por
no querer ir a un gimnasio? No tiene por qué, no hay nada malo en
preferir otras cosas. Y por otro lado, negar mis barreras. Para mi el
tema gimnasio es una gran barrera, no me gustan, no disfruto y punto. El
avance se produjo cuando acepte eso y busque otras alternativas, que
las hay.
En tu caso puede ser otra cosa que estás
intentando negar o justificar, y te juzgas porque no debería ser así;
pero es que es así y no pasa nada. Acéptalo y busca otra alternativa.
Hay que acabar con el mito de que para conseguir las cosas hay que
sufrir. Quizá para algunas cosas sí, pero lo que está claro es que
cuando haces algo de una forma que te gusta, eres más consistente y
tienes mejores resultados. Evita luchar contigo misma u obligarte a
aguantar ciertas cosas. Bastante duro es de por sí empezar algo nuevo.
Así que piensa, ¿qué barreras puedes evitar para que te resulte más
fácil hacer ese cambio que buscas?
3. Empeñarte en no hacer nada hasta que lo tengas todo controlado y seguro al 100%.
Está claro que es importante saber dónde
te metes, estar informada y preparada. Pero muchas personas utilizan
esto como excusa para estar formándose continuamente o para quedarse
paradas esperando a que pase algo que les asegure que todo va a salir
bien. Si quieres que las cosas pasen tienes que ponerte en marcha. Lo
bonito de ponerse en marcha no es sólo la motivación que sientes, el
aumento de autoestima y los resultados que obtienes; sino que abres las
puertas a nuevas oportunidades y personas que no habías ni considerado.
Esa es la mejor parte, que cuando empiezas el trayecto, en realidad no
sabes adónde te va a llevar el camino ni a quién te encontrarás en él…
Hay muchas cosas que pueden influir en
la decisión de ponerte en marcha y en si abandonas o no, estos tres
errores son algo a tener muy en cuenta a partir de ahora.
¿Con cuál te
identificas?
Fuente: https://www.gestiopolis.com/3-errores-impiden-cambios-personales/
No hay comentarios:
Publicar un comentario